20 integrantes de la Asociación de Productores de Pisco de la provincia de Cañete vienen participando de la afamada Feria “MISTURA” que se inauguró ayer en la ciudad capital.
Los productores se han unido bajo una sola marca colectiva llamada PASION CAÑETANA, que les ha permitido participar por segundo año consecutivo con productores de Mala, Santa Cruz de Flores, San Vicente, Imperial, Quilmaná, Lunahuaná, Pacarán y Zuñiga.
Uno de los que integra este selecto grupo es el reconocido dueño de la Bodega “Santa María” de Lunahuaná, José Espinoza Peña quien contó que hace 15 días se unieron todos los asociados para que los especialistas de la Cofradía de Catadores caten sus mejores piscos y con presentarse con lo mejor de sus producciones.
“estamos en Mistura con Pisco Italia, Quebranta, Mosto Verde de Quebranta, Mosto Verde de Italia y un acholado que serán del agrado de todos los que visiten nuestro stand”, señaló el varias veces campeón de pisco a nivel nacional, regional y local.
Espinoza Peña indicó que con la experiencia ganada el año pasado, en el presente 2012 quieren ir más allá de unirse para participar en Mistura sino que desean estar constantemente trabajando para posicionarse en el mercado bajo una sola marca colectiva que represente a los cañetanos.
“tenemos productos de primerísima calidad y la unión nos permitirá afrontar cosas mejores, como está sucediendo en diversas regiones pisqueras del país que facilite la venta a nivel nacional e internacional”, dijo entusiastamente.
De otro lado, al referirse a su bodega y su pisco “Don Benedicto” contó con gran satisfacción que ya viene realizando la exportación llegando a países como Chile, Estados Unidos y China.
Señaló que el mercado norteamericano viene requiriendo más producción peruana, para lo cual un empresario petrolero texano ha invertido como 40 millones de dólares para posicionar nuestro licor en tan grande mercado que beneficiará a los productores peruanos.
El recordado ex alcalde cañetano expresó su satisfacción por empezar a abrir el camino ya que luego de varios años en que el rubro llegó hasta la quiebra, recién ahora está volviendo a ganarse un espacio que avizora un futuro positivo que permitirá que la industria vitivinícola siga creciendo.